lunes, 12 de enero de 2015

EL MES DE: En Enero prometo...

Hola 2015! 

Ya ha llegado, dejando muy lejos, muy atrás, el 2014. Un año lleno de novedades, retos, sorpresas y momentos dolorosos. Pero ya estamos casi a mitad de Enero y este año entre listas de la compra, de repasos del piso, de muebles por comprar, de regalos para dar y otros para cambiar, de recados y de deberes, me he dado cuenta que no he hecho mi lista de propósitos para el nuevo año.


Ya sabemos que, como el balance del año que acaba, la lista de los propósitos para el año entrante es un must cada Enero. Sin embargo este año me cuesta más. Toda mi vida está patas arriba y ¿qué voy a proponerme yo si no sé lo que encontraré en esa caja guardada o en esa maleta cerrada?

Mis promesas, para ponérmelo fácil, serán sencillas y fáciles, no es por hacer trampa, es porque necesito sentir que hay algo que aún controlo y soy capaz de cumplir. Se me pasa la fecha del yogur en la nevera, se me pudre el plátano en la frutera, el pan se me olvida en la encimera, los cuadros permanecen en el suelo y el espejo aún no tiene lugar asignado, así que he decidido darme una tregua. 
No quiero ser ingenua, sé que no iré tres veces por semana al gimnasio, ni visitaré a mis abuelos cada 10 días. Sé que no podré mantener el orden en casa y que la tele seguirá en el suelo una temporada. Me temo que mi dieta será baja en todo, por pereza mayormente, y que mi rutina de belleza no variará de mucho. Pero creo que soy capaz de hacer (y cumplir) alguna promesa. Vamos a ello:

Prometo que pensaré en positivo cuando me despierte, la fuerza de una buena actitud no tiene límites. Me sonreiré por la mañana frente al espejo y me diré lo bueno que va a ser el día. Ver el vaso medio lleno siempre.



Seguiré mi instinto, y mi pasión. No me dejaré llevar por el atractivo de lo fácil o lo tentador. Me repetiré lo importante que es amar lo que haces. No matter what.



Trabajaré duro, exprimiendo al máximo la experiencia que me está brindando la vida. Venceré la pereza y el cansancio para conseguir lo que busco. Cultivar y cuidar a las personas que te rodean, da igual cuánto tiempo lleven en tu vida.


De manera semi regular me miraré al espejo con ojos críticos, dándome cuenta de la importancia de los cuidados básicos de belleza. Un poco de rimel y polvos hacen maravillas. Palabra.


Probaré combinaciones nuevas con mi ropa vieja. Reinventar mi armario, pues a falta de shopping buena es la imaginación.



Disfrutaré de las pequeñas novedades en casa. Poco a poco se va pareciendo a un hogar, aunque las mesitas de noche sigan siendo dos sillas y el baño no tenga espejo. Pero colgaré los cuadros que sí tengo y plancharé las cortinas que ya he estrenado.



Reuniré a mis amigos, les haré partícipes de lo que estoy viviendo y compartiré con ellos mi buena suerte y mi dicha.


Por fin veré el vídeo de mi boda, y el álbum. Si me decido a acabarlo todo de una vez.


Seré feliz. Porque la felicidad no es un destino sino un camino, y prometo intentar recorrer el camino de la felicidad en este 2015.






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Más Pepa Pamela en:

”instagram” ”pinterest” ”facebook” ”bloglovin” ”email”